domingo, 20 de marzo de 2011

¡Vivico de caldero!

¡Vivico de calderooo! pregonan por las calles de Guardamar (Alicante) Mª Tere y Encarna conduciendo la carretilla con la 'saranda' repletita de pescado fresco. (Pincha en la foto si quieres oirlo. Click the picture).
Antes eran más de veinte las mujeres que acudían cada mañana a la lonja para después, esquina a esquina, calle a calle, suministrar de pescado a toda la villa. Ahora ya sólo quedan ellas, y la verdad es que es casi una heroicidad continuar con el negocio intentando hacerse oir entre tanto coche y sin encontrar ya quién les haga esas preciosas bandejas de juncos, las 'sarandas', que, elaboradas con la técnica y material habituales en las nasas mediterraneas, parece que son un caso exclusivo de Guardamar. Pregunto en el puerto por el patrón mayor y me señalan a un hombre delgado y pequeño con aspecto de solitario que fuma un cigarro en la puerta de la taberna. Cordialmente va respondiendo a todas mis preguntas y dándome una información tan precisa y concisa de lo que necesito que parece que leyera mis pensamientos. "Las 'sarandas' para el pescado son unos bandejones propios de Guardamar y fuera de aquí no se han usado, ni siquiera en poblaciones tan cercanas como Torrevieja o Santa Pola. Las mujeres llevan el pescado en ellos para venderlo por las calles y aquí, en la lonja, se emplean para el langostino. Comienza a pescarse ahora en abril y necesitaramos un par de ellos que no sabemos si podremos conseguir." Sabe mucho este hombre sobre mar, barcos, pesca y navegación -probablemente no sólo de la que se hace en las aguas- y se queda uno con las ganas de seguir ahondando en su mar interior. Con una sonrisa de soslayo se despide y parece que no dijera adios sino hasta otra. ¡Ojalá!
Han sido unos días por estas tierras y he intentado curiosear en algunas de las cosas 'cesteras' que por aquí ha habido y hay. Aquí os va otra.
Elche está cerca y en esta ciudad y sus alrededores se fabrican la mayor parte de los ramos de palma empleados en la semana santa en toda España. Conchi, la profe de la escuela que el ayuntamiento ha creado para trasmitir estos conocimientos, me cuenta muy atentamente el proceso de elaboración. ¿Por qué una escuela cuando hay tánta gente trabajando en ello y conociendo sus técnicas? "Pues porque la mayor parte de la producción se limita a hacer lo más fácil y 'rentable' económicamente. Las piezas más elaboradas, con mayor riqueza de motivos, técnicas y detalles son un producto residual y en esta escuela se pretende hacer hincapié en ellas para que no se pierdan." "Esto es un vicio, cuando acabas en la escuela continuas en casa y a veces te dan las tantas de la noche y sigues en ello", me cuenta Jerónimo, uno de los alumnos. Lleva treinta añós trabajando en la palma blanca y ahora aprovecha una temporada de paro para seguir aprendiendo cosas. "Nunca se acaba de saber todo". Tiene más razón que un santo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Carlos y compañía soy Jerónimo de Elche te escribo para decirte que la palma que me visteis trenzar se llevo el tercer premio de artesanía municipal. Os mando un saludo y me encanta lo que hacéis por estos trabajos, espero que te hallan gustado las alpargatas que hizo mi amigo Jose Antonio.

Carlos Fontales dijo...

Enhorabuena por ese premio. Las esparteñas de Jose Antonio son una joya, es un autentico artista, lo mismo que tu. Intenté enviarte algunas fotos pero me las devolvía tu correo, si tienes otro dámelo por favor y, si te parece bien, envíame una foto de esa palma tuya premiada, me gustaría verla. Un saludo.