Y se acabó. Se acabaron: cestos de plástico y cables, paraguas para días sin lluvia, barco para navegar por tubos y colores, juegos en común y solitarios. Aprendimos mucho a la par que inventabamos y nos reíamos. Cualquier día continuamos. Para el que no estuvo allí, aquí van algunas fotos
(pincha en la de la derecha) , y si lo desea, en el Rato quedó a la vista y navengando en la quietud la nao sin nombre ni apellidos.
1 comentario:
La verdad es que estuvo genial..y aprendimos muchísimo. Y ya que estamos tengo algo que decir como cocreadora junto a Fátima del super paragues en su defensa: sí que vale para la lluvia, lo que pasa es que hay saber encajarse bajo él, mejor si viento, y si puede ser solo orballín o calabobos( esta lluvia fina que cae con parsimonia y persistencia a la vez, y que te pone como una pita a remojo en 10 minutos)...solo estos pequeños detalles a tener en cuenta...je,je..
Saludinos de Flor
Publicar un comentario